Cierra los ojos y visualiza…
Parece muy sencillo, ¿verdad? Una instrucción de cinco palabras que, para la mayoría de la población, es fácil de seguir. Tanto si se trata de meditación guiada, hipnosis, psicoterapia, yoga, estudio en clase, ejercicios de formación de equipos, prácticas de autoayuda, coaching mental para deportistas de élite o profesionales, coaching para el parto, etc., casi siempre se pide visualizar lo primero de la lista para entrar en el estado de ánimo, el espíritu, la zona o el estado de bienestar.
Para las personas con afantasía, como yo, la instrucción de ” cerrar los ojos y visualizar ” es imposible. A menudo, pedir que se visualice tiene exactamente el efecto contrario de lo que se intenta conseguir y puede provocar:
- Un estado de confusión:“¿Debo ver literalmente lo que me pides que vea?“.
- Frustración absoluta – “¡Otra vez no! ¿No podemos lograrlo sin visualización?“
- Sentimientos de inadecuación/fracaso – “Me pasa algo. ¿Por qué no puedo hacerlo?“
- Sentimientos de exclusión/vergüenza –“No voy a admitir que no puedo verlo cuando todo el mundo puede“.
Mi afantasía no fue provocada por un trauma físico o emocional, como he aprendido recientemente que puede ocurrir. Nací con ella, pero no fue hasta hace muy poco (tengo 56 años) cuando empecé a admitir (parte de la respuesta de vergüenza) ante la gente que cuando me piden que cierre los ojos y visualice, sólo veo distintos tonos de negro y gris.
Meditación con afantasía
No hay reglas fijas a la hora de meditar. Te ayudará encontrar un lugar tranquilo donde las distracciones sean mínimas y donde puedas taparte o cerrar los ojos, aunque eso tampoco es una regla. Puedes meditar mirando un lago, paseando por el bosque o bañándote. Toda meditación es, en realidad, un estado de calma profunda de la mente y el cuerpo. El objetivo de la meditación es… rellena el espacio en blanco.
¿Por qué te has sentado/tumbado a meditar?
Como mínimo, la meditación puede facilitar la relajación. Por tanto, si tu objetivo es relajarte, medita. Otros objetivos de la meditación podrían ser:
- Afrontar el estrés, las pérdidas, las enfermedades, etc.
- Mejorar el sueño
- Comunicarse con la mente inconsciente o el yo-alma
- Conectar con el reino cuántico, Dios o cualquier otra fuente superior en la que creas.
- Limpieza de los centros energéticos del cuerpo (chakras)
- Deseo de quietud
La lista es interminable…
Con innumerables objetivos positivos en mente, he probado -y abandonado rápidamente- la meditación muchas veces a lo largo de los años. No fue hasta septiembre de 2020 que me comprometí con la meditación, junto con tantas otras personas que buscaban herramientas para lograr el bienestar mental durante la pandemia de COVID-19. Al servicio de este compromiso, mediante ensayo y error, pude finalmente discernir que no era todo meditación lo que me tenía bloqueado. Era específicamente la meditación guiada la que causaba mi frustración.
Meditación guiada frente a frecuencias de sonido
La meditación como modalidad de espiritualidad/sanación requiere práctica. Por eso lo llaman práctica de meditación. Puede que por fuera parezcamos adultos maduros y controlados, pero nuestra mente puede ser como una habitación llena de niños parlanchines corriendo sin control. Requiere práctica aquietar el caos mental y estar quieto. Para los que pueden visualizar, la meditación guiada por voz puede ayudarles a centrarse precisamente en eso. Pero, en mi caso, una meditación afantasmática guiada por la voz desencadenó esos sentimientos de confusión, frustración, etc., como ya he mencionado. Cada sesión que probaba empezaba invariablemente con esas cinco palabras súper sencillas: cierra los ojos y visualiza… un bosque tranquilo o una hermosa puesta de sol o flotando en una nube, bla, bla, bla.
Una vez que dejé de intentar seguir las meditaciones guiadas, empecé a avanzar.
¿Recuerdas cuando dije que la meditación requiere práctica?
Meditar sin la guía de la voz puede requerir más práctica. Cuando descarté la meditación guiada, ya no había voz superpuesta, ¿y adivina qué? ¡Esos niños parlanchines tuvieron un desfile! No dispuesta a abandonar la meditación una vez más, probé la meditación con música y/o sonidos, como campanillas, ritmos binaurales, cuencos tibetanos, sonidos de la naturaleza, etc. Hay literalmente miles de ofertas en servicios de streaming como YouTube y Spotify, así como en aplicaciones para smartphones como Insight Timer y Waking Up, ambas disponibles en Google Play Store y Apple App Store de forma gratuita.
Tuve más éxito con música/sonidos en las frecuencias curativas Solfeggio.
Las frecuencias Solfeggio se han asociado, desde la antigüedad, con la creación de música sagrada (incluida la música de meditación) que se cree que favorece la curación.
He aquí algunas de estas frecuencias y la curación que promueven.
- 174 Hz alivia el dolor y el estrés
- 285 Hz cura tejidos y órganos
- 396 Hz te libera del miedo y la culpa
- 417 Hz facilita el cambio
- 528 Hz para la transformación y la reparación del ADN
- 639 Hz te reconecta con tus relaciones
- 741 Hz ayuda a encontrar soluciones y a expresarse
- 852 Hz te devuelve a un orden espiritual
- 963 HZ crea espacio para la unidad y la unidad
Meditación con mantras
Vale, por fin había dado con algo. Este enfoque ayudó a calmar el tumulto, pero aún podía oír algunas charlas perturbadoras. Para ello, además de escuchar música y sonidos, adopté la meditación con mantras. Existen muchas definiciones de la palabra mantra, su origen, su intención, etc. Con el más profundo respeto por el propósito más sagrado de utilizar mantras, he aquí la definición más sencilla que he podido encontrar:
mantra
Letra, palabra, sonido o frase que puede utilizarse en meditación y repetirse continuamente al inspirar o espirar.
Suponiendo que no sigas un tipo de meditación tradicional (hinduista, budista, etc.), tu mantra puede ser cualquier cosa que desees, incluso sonidos/palabras/frases inventadas, como:
- Sonidos o frases tradicionales como ohm o ahh
- Declaraciones de intenciones como: ” Ahora me gusta hablar en público y se me da muy bien”.
- Afirmaciones como: “Soy bella tal como soy“.
- Mantras para limpiar los 7 chakras principales como, Yo soy; Yo siento; Yo hago; Yo amo; Yo hablo; Yo veo; Yo entiendo
- Mantras tomados de otras fuentes
- Palabras/frases inventadas como Aroom dacti coom la ti vay bo mah (que es mi mantra).
Me inventé un mantra para no conjurar nada concreto. En cualquier caso, repetir palabras y frases de memoria puede ayudar a mantener la mente centrada simplemente en estar presente, en el momento presente y en alcanzar los objetivos de la meditación.
La meditación como práctica
Descubrir que era afásico fue una bendición para mí. Entre otras cosas, me dio una especie de -permiso subliminal- para liberarme de la carga de la visualización y explorar otras formas de meditar.
Aquí tienes enlaces a algunas de mis fuentes de música/sonido favoritas:
- Spotify playlist – Frecuencias curativas Solfeggio
- YouTube – 528Hz Whole Body Regeneration – Curación Corporal Completa | Curación Física y Emocional
- YouTube – Activación del Cuerpo de Luz Zen Espiritual
- Insight Timer (sólo enlaces móviles)